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08 Agosto, 2019
“Para la próxima campaña estimamos un crecimiento del 25%“
Los 147 millones de toneladas proyectados por el Gobierno Nacional para la campaña agrícola 2018-2019 marcaron un nuevo récord para el agro argentino. El mayor volumen de negocios impactó de lleno en el optimismo de las compañías agroindustriales que ya avizoran un próximo ciclo con buenas perspectivas.

“Siempre dependerá del clima pero asumiendo una situación promedio para el agro y sin algún evento climático desfavorable, sumado a la mejora de la compañía en términos financieros y con el plan de desarrollo que encaramos, tenemos una visión optimista para la próxima campaña que estimamos con un crecimiento del 25%”.

Así lo definió Jorge Arpi, CEO de Grupo Los Grobo, en diálogo con El Economista. El ejecutivo adelantó que ya se puede avizorar que la cosecha fina, de trigo y cebada proyectada para diciembre, “arrancó con el pie derecho”, por lo que espera un nuevo ciclo “interesante”, en contraste con los ciclos previos (sobre todo aquel afectado por la sequía) a los que definió como “difíciles” y “complejos”.

Es que el grupo agroindustrial, fundado por la familia Grobocopatel, viene de encarar una reestructuración necesaria para mejorar su estructura de capitalización y perfil de deuda. Meses atrás, la calificadora de riesgo Fix revisó su perspectiva desde negativa a estable, gracias a que recibió una inyección de capital de US$100 millones por parte de su grupo controlante – el fondo Victoria Capital Partners, que posee el 74% de la firma–, que logró recomponer la situación patrimonial.

La propia Fix confirmó recientemente esa calificación, asumiendo que la inyección de capital es considerado un factor fundamental para la calificación en vista al deterioro patrimonial evidenciado entre 2016 y 2017. “El 29 de marzo de 2019 se integró el 100% del monto total del aumento, con un patrimonio neto que representaba el 30% de la estructura de capital”, y agregó: “La compañía ha logrado mejorar su perfil de deuda luego del préstamo sindicado obtenido por US$ 44 millones –ampliable a opción de la compañía por hasta US$ 70 millones– que fue utilizado principalmente para refinanciar deuda de corto plazo. Fix estima que Los Grobo Agropecuaria logró reducir su concentración de deuda de corto plazo al 34% del total”.

Para Arpi, “la capitalización redujo el monto de deuda y la amplió a plazos más largos por lo que se redujo el estrés financiero. Hoy tenemos un número más razonable”.

El informe de la consultora resalta la mejora operativa de la compañía de los últimos meses. A marzo de 2019 (9 meses) el Ebitda (resultado operativo antes de Amortizaciones y Depreciaciones) fue de US$ 25 millones contra US$ 21 millones reportado en el mismo período del año anterior. “Dicha mejora se logró por la implementación de un programa de reducción de costos. No obstante las pérdidas por tipo de cambio siguen generando resultados netos negativos. A dicho mes el mismo fue de US$ 28 millones”, marcó.

Con un plan a cinco años (2018-2022) la compañía busca duplicar el volumen de negocios de originación de granos así como la facturación de la firma (llegar a US$ 1.000 millones para 2022), en base a acciones como sumar alrededor de 16 nuevas sucursales, de las cuales ya inauguraron seis, en el último año (9 de Julio, Belgrano, Tres Arroyos, Lincoln y Daireaux, en Buenos Aires, y Gualeguay en Entre Ríos).

En su último balance presentado a la CNV (Comisión Nacional de Valores), la firma remarca que el mayor valor del tipo de cambio “genera beneficios al sector agro industrial y a la compañía en el desarrollo de sus negocios”. Allí, da cuenta del resultado final neto negativo para el período de nueve meses finalizado en marzo de 2019, de $ 1.126 millones, con un incremento del margen bruto del 49%, respecto al mismo período en el año anterior. “El incremento en los resultados financieros se debe principalmente al resultado por diferencia de cambio por exposición de activos y pasivos, explicada con la fuerte devaluación que ha sufrido el país. Parte de esta exposición surge como consecuencia al cambio en la estructura de financiamiento con respecto al mismo periodo del año anterior, donde se estructuró la deuda financiera en moneda dólar y a mayor plazo (obtención del préstamo sindicado y ON en dólares de largo plazo), versus estructura de deuda en pesos y a menor plazo del periodo anterior”, aclara.

En total, la compañía administra un área de producción agrícola que se extiende por 188.000 hectáreas, de las cuales 99.000 son propias. Para Arpi, el próximo Gobierno, sin importar cuál sea, deberá poner foco en “facilitarle la vida a quienes generen divisas”. “Somos cautos. Esperamos un buen año pero no uno excelente, sobre todo por la caída de los precios de los productos a nivel internacional sumado a las retenciones que generan un impacto negativo en el negocio”, afirmó. lideargentina.com

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